¿Por qué se deben sacar las muelas cordales?

La extracción de las muelas cordales es una de las intervenciones más comunes, y su importancia va mucho más allá de una simple incomodidad. ¿Por qué se deben sacar las muelas cordales? A continuación, en este blog de la Dra. María Marín te explicamos sus riesgos, signos y los beneficios de realizar la cirugía previamente. ¡Conócelo todo aquí!

Evita inconvenientes: ¿por qué se deben sacar las muelas cordales?

Las muelas cordales, comúnmente llamadas terceros molares, se presentan entre los 16 y los 25 años. Sin embargo, existen personas que evidencian inconvenientes con su salida, ya que en la gran mayoría de los casos estas piezas dentales no tienen el espacio adecuado para salir correctamente. Aquí es donde surgen los problemas.  

Se deben sacar porque, al impactarse o crecer en una posición incorrecta, pueden empujar a los dientes adyacentes, provocar infecciones, dolor, inflamación y hasta quistes. 

A veces ni siquiera muestran síntomas hasta que el daño es avanzado. Identificar cuáles son las muelas cordales y actuar de forma preventiva es clave. En nuestra clínica, te ayudamos a elegir decisiones informadas y acertadas para proteger tu salud oral con tratamientos seguros y no invasivos.

¿Cuáles son las muelas cordales y cómo identificarlas?

Las muelas cordales son los últimos molares ubicados al final de cada arcada dental, superiores e inferiores. Suelen erupcionar en una etapa de adultez temprana y muchas veces de forma parcial o torcida. Esto causa molestias, dolor e incluso daño a otros dientes, por lo que es importante reconocer cuáles son las muelas cordales.

¿Por qué se sacan las muelas cordales si no duelen?

Aunque no presenten dolor inmediato, las muelas cordales pueden estar generando presión o desarrollando infecciones silenciosas. ¿Por qué se extraen las muelas cordales entonces? Por prevención: evitamos complicaciones futuras como apiñamientos, caries en los dientes vecinos, y otros trastornos que podrían requerir tratamientos más complejos.

El impacto en tu salud dental: ¿por qué se deben sacar las muelas cordales?

Muchas personas se preguntan por qué es necesario sacar las muelas cordales si estas aún no les han generado molestias. La realidad es que estas piezas dentales tienen un alto riesgo de causar complicaciones silenciosas. Al no tener espacio suficiente, quedan atrapadas bajo las encías o en posición angular, lo que puede derivar en infecciones, caries en los dientes vecinos, inflamación de encías o incluso daño óseo. 

Además, pueden afectar la alineación dental, especialmente en pacientes que han usado ortodoncia. En casos más severos, se han detectado quistes o tumores alrededor de estas muelas. Retirarlas a tiempo con un procedimiento mínimamente invasivo es una medida preventiva efectiva. Al contar con un equipo profesional y materiales de alta calidad, en nuestra clínica realizamos extracciones seguras, cómodas y con rápida recuperación. Prevenir hoy es evitar problemas mayores mañana.

La Dra. María Marín busca cuidar tu salud oral por medio de tratamientos profesionales.

¿Qué síntomas indican que debes extraerlas?

Dolor en la parte posterior de la boca, dificultad para abrir la mandíbula, mal aliento frecuente o inflamación de encías son señales de alerta. Si has notado cualquiera de estos síntomas, podría tratarse de una muela cordal en mal posición. Otros indicios incluyen infecciones repetitivas o presencia de caries en los últimos molares. 

Aunque no siempre generan dolor inmediato, las complicaciones pueden ser progresivas. Una evaluación profesional te permitirá saber si tus cordales deben ser extraídas o si es posible conservarlas sin riesgo. La Dra. María Marín analiza cada caso con tecnología avanzada y un enfoque personalizado para cuidar tu bienestar.

¿Cómo es el proceso de extracción y recuperación?

La extracción de muelas cordales es un procedimiento seguro y rutinario. Se realiza bajo anestesia local, y en muchos casos, la cirugía dura menos de una hora. Dependiendo de la posición de las muelas, puede requerirse una pequeña incisión para facilitar su extracción. La recuperación es rápida, con reposo de uno a tres días y cuidados básicos como evitar alimentos duros y enjuagues agresivos. 

La Dra. María Marín utiliza técnicas no invasivas y materiales de última generación para acelerar la cicatrización y reducir molestias postoperatorias. Asimismo, se enfoca en brindarte una experiencia sin estrés, cómoda y con acompañamiento continuo. ¡Agenda tu consulta de valoración!

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